Los griegos
Finalmente, Sócrates fue llevado a juicio ante un jurado de unos quinientos hombres, en 339 a. C., y fue acusado de impiedad y de corromper a la juventud, aunque su crimen real era el de ser, o aparentar ser, antidemocrático. Probablemente Sócrates habría sido absuelto si no hubiera insistido en usar su método socrático con el jurado hasta enfadarlo y hacer que lo considerase culpable por una estrecha mayoría de 281 contra 220.
Por entonces, las ejecuciones se llevaban a efecto haciendo beber a la persona juzgada culpable cicuta, extracto venenoso de una planta que mata sin dolor. Por razones religiosas debían transcurrir treinta días antes de que Sócrates tuviese que beber la cicuta. En ese intervalo podía haber escapado fácilmente; sus amigos lo tenían todo arreglado y hasta los demócratas de buena gana habrían hecho la vista gorda. Pero Sócrates tenía setenta años y estaba preparado para morir, de modo que prefirió cumplir con los principios del ciclo vital y de adhesión a la ley.
Isaac Asimov